Escrito por Dusanka Seratlic, editado por Denise Schaefer & traducido al español por Teresa Carballo

¿De qué estamos hablando cuando hablamos de la Web3? Tal como está actualmente, Web3 es esencialmente una idea, una concepción poco rígida que se basa en la tecnología blockchain. Mientras que la tecnología detrás de los criptoactivos y NFTs es sólida y constatable, el significado de Web3 está aún en constante movimiento.

Tal vez una definición apropiada seria que la Web3 está formada de todos los sistemas sociales digitales que construimos utilizando blockchain. Esos sistemas pueden ser comunidades, marketplaces, grupos de inversión en proyectos de NFTs, herramientas para publicar o plataformas educacionales, pero para que sean considerados parte de la Web3 tendrían que hacer uso de servicios basados en la tecnología blockchain.

En este artículo vamos a echar un vistazo a la tecnología detrás de Web3, el problema social que Web3 busca resolver y las posibilidades que Web3 ofrece.

Una rápida mirada a la Web 2.0: ¿Porque la necesidad de construir la Web3?

Web 1.0 es el internet de las páginas web estáticas, un internet que es solo para leer y con usuarios que eran meramente consumidores del contenido publicado. A inicios del siglo 21, la manera en que usábamos el internet empezó a cambiar a la Web 2.0, que es el internet como lo conocemos hoy.

Web 2.0 trajo nuevas formas para que los usuarios se convirtieran en creadores de contenido, no solo consumidores. Vimos el incremento en plataformas de redes sociales, autopublicaciones y contenido generado por usuarios. Este internet es sobre leer y escribir, ahora podemos interactuar entre nosotros y con las plataformas que usamos.

Web 2.0 transformó casi todos los aspectos de nuestra sociedad, desde la comunicación, medios y negocios, hasta las interacciones y relaciones sociales. Cada vez más, estamos realizando nuestras actividades en línea. Los creadores tienen plataformas en las que pueden compartir su contenido, mientras los negocios tienen un espacio para promover sus servicios y alcanzar audiencias que antes hubiesen sido inaccesibles.

Entonces, ¿cuál es el problema? La Web 2.0 suena bastante bien.

El cambio de Web 1.0 a 2.0 también vio un cambio de descentralización a centralización. Si piensas en ello, la mayoría de las interacciones en línea ocurren desde los confines de los gigantes tecnológicos, como Google, Facebook, Amazon y similares.

Las grandes plataformas de tecnología generalmente son gratis y están disponibles a la mayoría de las personas, pero sus servicios vienen con ciertos costos. En los últimos años nos hemos dado cuenta de problemas como protección de datos, seguridad, censura, cámaras de eco basadas en los algoritmos y monopolización de atención e información.

La Web3 es la solución propuesta a las deficiencias de la Web 2.0. Sin eliminar los aspectos divertidos del internet, Web3 es el internet donde podemos leer, escribir y ser dueños de nuestros datos, contenidos e identidad.

Cuando creas una cuenta en Facebook, por ejemplo, no tienes mucho control sobre la manera en que tus datos son guardados, analizados, y vendidos. En la Web3, te conviertes en el único titular de tus datos e identidad en línea. Tu decides el compartirlos y monetizar tus activos.

La Web3: El caso de una red descentralizada

La mayor promesa de la Web3 es un internet que sea descentralizado, abierto, sin necesidad de confianza –trustless-, que no requiera autorización para poder usarse – permissionless- y seguro. En el lado técnico, la visión de la Web3 también incluye conceptos de componibilidad, interoperabilidad, y verificabilidad. Socialmente, la Web3 promete eliminar la necesidad de intermediarios, establecer relaciones peer-to-peer –entre iguales-, cambiar la manera en la que percibimos e intercambiamos valores en línea, y además darnos las herramientas para volver a obtener el control de nuestras identidades en línea.

Lo sabemos, es mucho que entender, Vamos punto por punto.

Web3: La tecnología

Blockchain es la principal tecnología detrás del desarrollo de la Web3.  ¿Qué es Blockchain? Puedes aprender las bases en este articulo. Por el momento, es importante subrayar que blockchain es la tecnología que hace posible tener redes   descentralizadas, abiertas y peer-to-peer.

La descentralización asegura que no hay una entidad central tomando decisiones por el resto de la red. También asegura que los datos contenidos en un blockchain sean distribuidos entre una red de participantes, evitando una falla central y protegiendo la integridad de la red.

La mayoría de los blockchains son abiertos y “permissionless”. El código es abierto, lo que significa que cualquiera lo puede revisar. Además, no necesitas ningún permiso para involucrarte en una red de blockchain – lo único que necesitas es conexión al internet.

Tambien tiene la característica de ser “trustlessness” o sea, sin necesidad de confianza – esto se basa en la habilidad de los participantes de la red de revisar el código y poder confiar en la veracidad de la arquitectura del software. En Web 2.0, necesitas confiar en una tercera persona o intermediarios para que sean los facilitadores de una interacción o acuerdo. Estos intermediarios proveen garantía de que dicho acuerdo sucederá como acordado. En blockchain, el código es el que provee la garantía. Entonces, las transacciones se vuelven peer-to-peer, lo que significa que Alice y Bob pueden ahora acordar directamente entre ellos.

La seguridad y privacidad también son grandes ventajas de la tecnología blockchain. Aunque todo en el blockchain es transparente, también cuentan con la función de hash criptográfico. Esto significa que puedes ver el historial completo de transacciones en un blockchain, pero no puedes saber las identidades específicas de las personas que hicieron las transacciones.

Estas características del blockchain dan paso a posibilidades muy emocionantes. El blockchain de Ethereum, por ejemplo, tiene contratos inteligentes –programas que se ejecutan automáticamente al  cumplirse las condiciones que les fueron programadas. Los contratos inteligentes están permitiendo la  creación de muchas aplicaciones descentralizadas (dApps) y organizaciones autónomas descentralizadas(DAOs).

Los blockchains también permiten la componibilidad. Esta es una característica importante ya que permiten ser interoperables a todas las dApps creadas en el mismo blockchain, dApps dentro de Ethereum, por ejemplo. Como desarrollador, puedes crear sobre dApps preexistentes, mezclar y emparejar diferentes dApps para ofrecer servicios variados. 

Lee este articulo para entender como se combinan diferentes layers –capas- para crear la Web3. Esta interoperabilidad es posible solo entre un mismo blockchain… por ahora. Varios equipos de Web3 están trabajando para que blockchains como Ethereum y Bitcoin sean interoperables. Una vez que exista esta interoperabilidad entre redes de blockchain, verdaderamente veremos el crecimiento de la Web3 como la visualizamos.

Web3: Los valores

Con sus bases en blockchain, la Web3 promete nuevos modelos de valor social. Por ejemplo, las DAOs, ofrecen una nueva manera en que las personas se organicen y trabajen juntas. Los NFTs están transformando la manera en que creadores pueden monetizar su trabajo. Los tokens sociales están llevándonos en una nueva ola de cómo nos comunicamos y creamos valor juntos.

Las posibilidades en la Web3 son infinitas, pero los valores centrales están basados en la descentralización, democratización de acceso, seguridad y privacidad. Con las aplicaciones de la Web3, los usuarios podrán ser dueños de sus datos y manejarlos, decidiendo cuándo y cómo monetizarlos y compartir sus activos. Este también hará más fácil el probar y dar seguimiento a la titularidad de activos digitales.

Puede ser que el aspecto más interesante de la Web3 sean los modelos económicos que podemos crear con los tokens. Desde finanzas regenerativas -regenerative finance- a tokens sociales, la Web3 nos permite asignar valor real y económico a valores sociales que previamente eran más abstractos.

La Web3: ¿Dónde estamos ahora?

La Web3 es una visión con muchas vertientes en constante movimiento. La tecnología es bastante reciente pero ya tenemos a muchas personas talentosas creando nuevas aplicaciones de la Web3. La mayoría de dApps y DAOs están actualmente alojadas en el blockchain de Ethereum, pero hay muchos otros proyectos súper interesantes que van a expandir la visión de la Web3 y las opciones que tienen los usuarios.

Ya sea que estés comprando criptomonedas, creando NFTs, participando en DAOs, o creando en el blockchain, ya estás participando en la Web3. La manera en que esta visión se va a traducir a la vida real, depende en gran medida de nuestros valores communes y nuestra habilidad de trabajar juntos. La tecnología es una parte fundamental de la Web3, pero no es la única. No tienes que ser un desarrollador para poder aprender y crear en la Web3.

De hecho, para que la Web3 realmente empiece a cumplir lo que promete, necesitamos reimaginar  creativamente las maneras en la cuales colaboramos, nos comunicamos y creamos organizaciones.

Construyamos juntos

Un proyecto en la Web3 o una comunidad es solo tan bueno como las personas que la conforman. El principio de la colaboración abierta es lo que hace a la Web3 tan emocionante. La única manera de poder ser partícipe de que la visión que temenos de la Web3 se haga realidad, es tomando hoy un rol activo en el desarrollo de este nuevo ecosistema, buscando que funcione de la mejor manera en el futuro.

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